Efecto invernadero

El efecto invernadero es un fenómeno natural que permite mantener la temperatura del planeta, al retener parte de la energía proveniente del Sol. La Tierra se mantiene lo suficientemente caliente como para hacer posible la vida sobre el planeta.

Los gases de efecto invernadero retienen parte de la energía que el suelo emite como radiación infrarroja, después de haber sido calentado por la radiación solar.

El vapor de agua, dióxido de carbono, metano, óxidos de nitrógeno, ozono y clorofluorocarbonados son los denominados gases de efecto invernadero.

En el último siglo la concentración de dióxido de carbono y otros gases invernadero ha ido creciendo constantemente debido a la actividad humana.

Los procesos industriales con el uso de combustibles fósiles ha incrementado la concentración de dióxido de carbono hasta unas 375 ppm.